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Las tendencias en el consumo de whisky están experimentando una evolución constante, con productores y marcas trabajando incansablemente para satisfacer las cambiantes necesidades de los clientes en todos los segmentos. Además, pueden variar según el país y el período, pero hay una constante: los “nuevos whiskeros” buscan bebidas de alta calidad, distintivas y exclusivas. Este mercado se ve impulsado por cambios en los estilos de vida, las preferencias de los consumidores, y las ofertas innovadoras que están ganando terreno y atrayendo mucha atención.

En este contexto, en 9 Smoking Barrels hemos identificado 10 tendencias clave que se deben tener en cuenta para el año 2024. Estas tendencias abarcan una variedad de aspectos, desde nuevos sabores y destilados hasta técnicas de producción innovadoras. Vamos a explorar cómo estas tendencias están dando forma al panorama actual del whisky y qué podemos esperar en los próximos años.

1. Experimentar más… beber mejor

Durante más de 15 años, el “premium” ha tenido un gran impacto y esta tendencia seguirá dando forma a la industria de las bebidas. Los consumidores quieren pagar más para saber que están recibiendo ingredientes y productos de primera calidad con una historia que destaque el quién, qué, dónde, cuándo, por qué y cómo de la marca.

2. Crear experiencias inmersivas con el whisky

Otra de las tendencias prevé que más consumidores se decanten por los destilados en lugar de la cerveza, ya que buscan una experiencia que les introduzca en nuevos licores, cócteles y maridajes. Las marcas tienen que alcanzar un delicado equilibrio entre ofrecer algo nuevo sin resultar demasiado extravagante o intimidatorio. Los nuevos espirituosos tienen que ser a la vez únicos y familiares, lo que puede suponer todo un reto para el mercado actual.

3. El auge del whisky japonés

El whisky japonés ha experimentado un aumento de popularidad en los últimos años debido a su perfil de sabor único y a la artesanía que se percibe en su producción, su relativa escasez, ya que muchos productores no tienen capacidad para satisfacer la demanda mundial de sus productos y además, su éxito en competiciones internacionales, ha contribuido a forjar su reputación y aumentar su popularidad.

4. “Funky Stuff” y whisky experimental

Es latente el auge del whisky artesanal y en pequeños lotes, ya que cada vez más consumidores buscan bebidas únicas. Asimismo, la creciente popularidad de los whiskies no añejos, incluyendo el “white dog” o el “new make” (que es el aguardiente claro que sale del alambique antes de envejecer en barricas), está ayudando al mercado a encontrar consumidores nuevos y más jóvenes.

5. El acabado en barrica y la importancia de la madera

El whisky acabado en barrica, también conocido como “wood-finished”, es el whisky que ha sido transferido de su barrica de envejecimiento original a una segunda barrica para un periodo de envejecimiento adicional. Se ha convertido en una tendencia popular en la industria en los últimos años, ya que permite a los productores añadir capas adicionales de sabor y complejidad a sus productos. También es una forma de crear whiskies únicos y de edición limitada que no forman parte de su gama habitual de productos.
Algunos tipos comunes de madera utilizados para el acabado en barrica son el oporto, el jerez, las barricas de vino y otros tipos de roble. El tiempo que el whisky pasa en la barrica secundaria puede variar, pero suele ser de varios meses a varios años.

6. Marcas y productos sostenibles

La tendencia ecológica va de la mano de la ‘premiumización’. Incluso los grupos demográficos más jóvenes están dispuestos a dar prioridad a las características ecológicas. La atención se centra en la calidad por encima de la cantidad, lo que incluye marcas transparentes sobre el origen de sus ingredientes y lo que hacen para reducir su impacto en el medio ambiente.

7. Whisky and friends… make a great blend!

Una tendencia que se espera que continúe es la creciente aceptación de los “Blended Whiskies”. Otra tendencia es la creación de mezclas de whisky de distintos países. A medida que el mundo y “nuestro sentido de procedencia” cambian, también lo hacen las bebidas que consumimos.

8. Invertir en whisky

Invertir en whisky se ha hecho muy popular en los últimos 5 años. Desde coleccionar botellas hasta comprar barricas de whisky, pasando por nft’s y destilerías financiadas por crowdfunding…. Es una buena idea para aquellos que buscan diversificar sus inversiones y disfrutar del proceso de coleccionar diferentes whiskies de distintas regiones y destilerías. Sea como sea, no inviertas hasta que no conozcas bien el mercado y el negocio.

9. Whisky y tecnología blockchain

Las NFT se desarrollaron originalmente para la propiedad de obras de arte digitales, pero desde entonces se han utilizado para otros activos en línea, como el whisky. En la actualidad, no existe una legislación que aborde específicamente las NFT para el whisky, pero es probable que surja una pionera que establezca cómo pueden utilizarse estos tokens. Se espera que las NFT sean más útiles para establecer la procedencia de las botellas de whisky, ya que proporcionan una cadena ininterrumpida de propiedad.

10. Diversidad, equidad e inclusión

Los consumidores también quieren sentirse vinculados a las marcas a través de valores compartidos. Cada vez más, las empresas dan prioridad a la representación, especialmente en los puestos directivos. Este tipo de representación influye en la cultura de la empresa y, en última instancia, en el tipo de productos que se fabrican. Todo, desde ampliar la oferta de sabores hasta replantearse las estrategias de marketing y publicidad, se hace ahora de forma significativa para llegar a un público más diverso y global.

Los whiskies del viejo y del nuevo mundo están revolucionando la categoría del whisky tradicional. Los productores del ‘viejo mundo’, como Escocia, EE.UU. e Irlanda, tienen una base sólida sobre la que construir el futuro de sus whiskies, mientras que las marcas del ‘nuevo mundo’, como las de Japón, Taiwán, Dinamarca e India, se benefician de una normativa más flexible y de menos limitaciones, lo que les permite experimentar con mayor libertad.

¿Por dónde empezar?

El mejor punto de partida siempre es la educación, la curiosidad y una mente abierta. Mientras muchas marcas se esfuerzan por educar a los consumidores sobre los distintos tipos de whisky, sus métodos de producción y cómo disfrutarlos, otras se centran en ofrecer catas, organizar eventos didácticos y proporcionar información detallada. El sector está adoptando diversos enfoques para atraer e implicar a nuevos consumidores de whisky, en un intento de aprovechar la creciente popularidad de la categoría. En general, estamos trabajando para hacer del whisky una bebida espirituosa más democratizada y accesible.

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